Magna Fiesta

El hotel "Fiesta Americana" Mérida, celebra con causa

Son muy comunes las invitaciones a eventos en las fechas navideñas; ésta noche mi marido y yo asistimos al evento que el hotel Fiesta Americana en Mérida relaliza para encender el árbol navideño.
Llegamos cerca de las 5:00 pm y el evento comenzaba las 6:00 pm, ésto nos dio tiempo suficiente para observar todo lo que acontecía durante la instalación decorativa. Llamó mucho mi atención que el personal que se encontraba instalando hizo un magnífico trabajo de equipo en el que figuraban no sólo personal de mantenimiento sino de otras áreas incluyendo Gerentes. Todos ellos con muy buena actitud y alegre disposición.

Cuando comenzó el evento, el Director General del hotel dio la bienvenida a los invitados y nos informó que: Exhortaba al público en general para participar en la colecta que se inicia a partir del día de hoy y hasta el 6 de enero; se trata de donar regalos para niños que serán entregados al Centro Cultural "San Francisco Tzacalhá" A.C. el 9 de enero de 2016.
La dinámica es super sencilla y quien desee participar puede hacerlo llevando un regalo infantil al lobby del hotel y colocarlo en la casita de jengibre, que por cierto es más grande este año.

El Centro Cultural que recibirá esta importante donación realiza trabajo de sensibilización y enseñanza de diversas disciplinas artísticas a niños y jóvenes de comunidades vecinas del municipio de Dzidzantún, en donde tiene su sede. Lo hace de forma gratuita, trabaja con maestros y personal voluntario y se sustenta con el apoyo de sus benefactores.

Resulta pues, excelente noticia que una compañía tan importante como éste hotel que es propiedad de una cadena nacional, realice ésta generosa actividad durante un evento tan importante para ellos. De ésta forma todo el esfuerzo y dinero que un evento de tal magnitud conlleva se encausa a una labor que beneficia a buena parte de la sociedad.

Amenizó la noche la magnífica presentación de Morita con un show navideño y las encantadoras y Mexicotalentosas voces del Coro infantil del mismo Centro Cultural.

Nos retiramos con un muy buen sabor de boca, literalmente porque los invitados pudimos degustar de galletas, refrescos, chocolate y champagne.